Hoy la he
pillado in fraganti haciendo algo que no debía: Se estaba acicalando, cosa que
como todos los gatos hacen muy a menudo y durante bastante tiempo, y al llegar
a la pata delantera derecha, comenzó a morderse. Me extrañó. Pero lo dejé
correr pensando que podía ser parte del acicalamiento. A mi anterior mascota,
Mysy, la había visto innumerables veces haciéndose la manicura de sus zarpas
con los dientes, sin peligrosas consecuencias.
Pero al rato
observé que Sofy seguía mordiéndose y que tenía ya un cerco rojizo de unos dos
centímetros de largo. La reñí, lo dejó, volvió a morderse … ¡Ya no sabía qué
hacer!. Estaba claro: La picaba esta zona y se arrascaba con los dientes. Lo
malo es que, como sucede con los niños, Sofy no entendía que era mejor no
arrascarse, y menos con los dientes o colmillos, que crearse una herida.
Sofy, bostezando tras despertarse. |
Algo más tarde,
al acariciarla el pescuezo, noté tres o cuatro pequeños bultos. La inspeccioné
como pude y consideré que eran postillas de heridas que se había hecho al
arrascarse. Me cuesta creer que tenga pulgas, piojos o que la haya picado algún
insecto. Aún hace frío, vive en un piso cerrado y nunca sale de casa, razón por
la cual descarto parásitos externos. ¿Pueden ser ácaros?. Lo dudo, pues la casa
se ventila, se barre y se friega varias veces a la semana.
¿Pueden ser
hongos producidos por la hierba que se marchitó?. Investigaré.
Hacia mediados de mayo, coincidiendo con su primer cumpleaños, la compraré un collar antiparasitario. ¡Ponérselo será toda una
odisea!.
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