Mi lista de blogs

martes, 31 de octubre de 2017

Sofy en mi regazo





¿Qué la pasa a Sofy? No, no es nada preocupante. Pero si de repente hace algo inusual, algo que nunca había hecho hasta entonces… Saltan las alarmas y piensas que puede estar enferma.
Ya lo he dicho varias veces en otros spots. Sofy no tiene un lugar fijo para dormir. Excepto en la cuna, duerme en su rincón del tresillo, sobre los papeles de una mesa, sobre el asiento de alguna silla, debajo o encima de alguna cama cuando encuentra abierta la puerta de alguna habitación…
Cuando tras cenar, me siento a ver la televisión en un extremo del tresillo, al rato aparece Sofy, salta al tresillo y se acuesta en el otro extremo. Eso es lo normal. Pocas, muy pocas veces, se aposenta en medio del tresillo, a mi lado. Y cuando alguna de esas pocas veces la cojo y la pongo en mi regazo, no tarda mucho en irse. Hasta aquí normalidad.
Pero hace una semana que Sofy ha roto esa normalidad. Hace una semana que Sofy se aposenta en mi regazo, sobre mis piernas. Unas veces dormita, otras simplemente está acomodada. Tras un buen rato así, a veces salta al suelo, se va a comer o beber algo, y vuelve a recostarse en mi regazo. ¿A qué se debe esa nueva costumbre? No lo sé. Estoy sorprendido.
Sofy bostezando

Si pasa bastante tiempo y noto que sus seis kilos de peso me molestan, intento apartarla. Y digo intento porque no siempre lo consigo, ya que se resiste a abandonar una posición donde, parece ser, está muy confortable. En casi seis años de convivencia nunca había tenido esa nueva costumbre, pues a lo sumo, en tres o cuatro ocasiones, al recostarse a mi lado, había invadido con parte de su cuerpo una sola pierna mía, que no las dos.

Habrá que seguir observando atentamente. Desde luego que no deja de sorprenderme. Y quizás lo mejor es el enfado que muestra, nada agresivo por otra parte, cuando la intento apartar de mi regazo.   

No hay comentarios:

Publicar un comentario