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jueves, 27 de abril de 2017

Sofy aseándose

Como, revisando lo anterior, hace mucho que no incluyo un video, aquí les dejo uno.
Sólo dura un minuto.
Sólo se asea parte de la cara.
Pero puede dar una buena idea de lo fascinante que es ver a un gato asearse.
Sin champú.
Sin jabón.
Ni siquiera con agua.
Y a pesar de todo lo anterior, lo limpio y reluciente que les queda el pelo.
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miércoles, 19 de abril de 2017

Ataque de tigres



Hay una famosa frase que dice: “Dios hizo al gato para darnos el placer de acariciar al tigre”, atribuida a Víctor Hugo, y que ya he repetido en este blog.
El tigre, primo mayor de nuestras queridas mascotas felinas, es un animal espectacularmente hermoso, soberbio y elegante. Nos puede causar fascinación, pero no es una mascota, no puede socializarse y es muy complicado de domar para, por ejemplo, trabajar en un circo.
En menos de un año leo dos trágicas noticias sobre ataques de tigres a humanos. En ambos casos se debió a causas ajenas a los propios tigres.
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En la primera noticia “Una trabajadora del parque Terra Natura de Benidorm (Alicante) ha fallecido este sábado tras ser atacada por un tigre”.
Los hechos se han producido sobre las cinco de la tarde en el cobijo interior de los tigres asiáticos cuando la cuidadora, "por un descuido", ha dejado medio abierta la puerta de la zona donde estaban los tigres y ha sido atacada por uno de ellos hasta causarle la muerte.
… "llevaba trabajando para el parque desde hace ocho años como experta cuidadora en felinos y otras especies".
El director del parque ha informado de que “el animal que mató a la trabajadora "permanece confinado y aislado" y su futuro se determinará "a instancias de lo que se decida judicialmente".
Un descuido lo tiene cualquiera, aunque bien pudo tratarse de un repentino malestar y/o desvanecimiento de la cuidadora.

Dos tigres, aparentemente jugando

La segunda noticia es más peliaguda: “Una mujer muerta y otra herida tras el ataque de varios tigres en un safari en Pekín”.
Leo que una de las mujeres discutió con el conductor y salió del coche para ponerse al volante y, en el momento en el que trata de volver a entrar en el vehículo, un tigre se lanzó sobre ella y se la llevó arrastrando.
Con el fin de ayudar a la víctima, salieron del vehículo un hombre, que parece ser el conductor, y la otra mujer, quien fue atacada por otro tigre y resultó muerta.
Los trabajadores del parque consiguieron rescatar a la mujer que resultó herida y se encuentra en estado estable.
El complejo ofrece ver a los animales salvajes muy "de cerca", si bien se advierte a los visitantes que no salgan de los vehículos.
El Badaling Safari World ha sido cerrado y permanecerá así hasta que finalice la investigación sobre lo ocurrido.
En esta segunda noticia no se indica nada acerca del estado de los tigres, aunque mucho me temo que puedan ser sacrificados.
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Un tigre, mal que nos pese, es un animal salvaje. Un gato es un animal auto domesticado, sensible, hermoso y elegante. Como sugirió Víctor Hugo, podemos acariciar un gato sintiendo el mismo placer que si fuera un tigre.

martes, 18 de abril de 2017

Sofy haciendo equilibrios temerarios.



            Si hay algo que caracteriza a un gato es su temeridad. Son temerarios por naturaleza, que no valientes. Valentía es cuando una gata protege a sus cachorros de un depredador, enfrentándose a él aunque sea más grande y poderoso que ella. Todos conocemos algún caso en el que la mamá gata no deja acercarse a sus cachorritos a nadie, ni tan siquiera a los dueños de la casa en la que ha sido la mimada mascota durante años.
            Si se trata de defender el territorio, esa valentía ya no es incondicional. Depende del tamaño y el carácter del contrincante. Entonces se lo piensa. Y si el contrincante es más grande o de peor carácter, desaparece la valentía; y en el peor de los casos, si es algo temeraria, sufrirá las consecuencias de no haber medido bien las oportunidades de triunfo.
Pero sea gato o gata, en la mayoría de las ocasiones cotidianas, al no tener que defender ni a la prole ni al territorio, sobra la valentía y aparece la temeridad.
La temeridad es consecuencia directa de la curiosidad. “La curiosidad mató al gato”, indica acertadamente un dicho popular. Porque sean más o menos valientes o más o menos temerarios, lo cierto es que son tremendamente curiosos.
“Siete vidas tiene un gato”, indica otro dicho popular. ¡Menos mal!, porque debido a esa curiosidad extrema se meten en cada berenjenal que, en muchos casos, les hace perder alguna de esas vidas.
Pero no hace falta llegar al extremo de peligrar la vida por la temeridad consecuente con su curiosidad. Pueden caerse, romperse una pata, lastimarse una costilla, romperse la nariz, y un largo etcétera.
Lo de que "los gatos siempre caen de pie", no es siempre cierto. Depende de la altura, que debe ser considerable. Y a dicha altura, no romperse algo sí que sería más que milagroso.

Sofy buscando un apoyo para acceder al mueble.

Navidades pasadas. Sofy y yo fuimos a pasar unos días  a casa de un familiar. Un mueble bar con cristaleras transparentes. Tras los cristales figuras y demás adornos de colores brillantes, muy llamativos. Pronto Sofy se fijó en ellos. Se pasaba tiempo y tiempo parada frente al mueble. A veces movía ligeramente la cabeza de uno al otro lado, oteando. También a veces hacía ademán de querer brincar, pero desechaba el salto. No había ninguna tarima intermedia para poder acercarse a las figuras tras el cristal.
Pero la curiosidad es la curiosidad. Al lado del mueble bar estaba una mesa para la televisión, y además relativamente cerca del mueble que incitaba su curiosidad. Saltó sobre la mesa, esquivó como pudo la televisión y empezó a hacer arriesgados equilibrios para acercarse a las vitrinas que contenían las atractivas figuras.

Sofy, en una posición muy comprometida.

Afortunadamente tenía la cámara de fotos a mano. Durante un par de minutos nos hizo sonreír a todos los presentes y reír a algunos. No llegó más lejos de lo que muestran las fotos que la saqué. Tras varios intentos por alcanzar la vitrina, tras numerosos y temerarios equilibrios, cesó en el intento. Al menos no se cayó al suelo. Claro, que, si se llega a caer de menos de un metro de altura, aunque se hubiera hecho daño, hubiera vuelto a saltar. ¡Faltaría más!

jueves, 13 de abril de 2017

Razas de gatos sin pelo



“Dios hizo al gato para darnos el placer de acariciar al tigre”
“Los gatos, nuestros queridos compañeros peludos”
Son dos de las múltiples frases que remiten al pelaje de un gato. Algunos no podemos concebir un gato sin pelo, nos parece algo antinatural. Pero por lo visto hay razas de gatos sin pelo o con poquísimo pelo. Y no una, sino seis o siete. Veamos, de forma resumida, lo que he encontrado.

El Gato Sphynx

El Sphynx, el gato egipcio o la esfinge. Su calvicie aparece de forma espontánea en 1966 en Canadá, y no Egipto). Algunos lo encuentran más parecido a un murciélago o una rata que a un gato.
Los gatos Sphynx proceden de una mutación natural, no artificial. Los ancestros del Sphynx se remonta a la época Precolombina, tal y como muestran los grabados y vasijas de cerámica encontradas. Según las últimas investigaciones aparece una nueva raza de gato sin pelo cada 15 años.
La cría del Sphynx es muy difícil, pues tan sólo uno de cada cuatro gatos nace con el gen recesivo de la falta de pelo y no se manifiesta en toda su descendencia.
Presenta cualquier color de piel y un peso entre 3 y 7 kg. Viven unos 10 o 15 años. Son muy afectuosos y sociables. Aman los interiores y la calidez del hogar. Obviamente en invierno se sienten mucho más incómodos.

Gato Sphynx

El Gato Elfo

Es el resultado de la unión entre gatos Sphynx y American Curl. Sin pelo y con la punta de las orejas doblada. Al igual que el gato esfinge deben ser bañados con regularidad y protegidos de una excesiva luz solar.

El gato Donskoy

Surgió en la ciudad de Rostof, a orillas del río Don. Es el resultado de una mutación espontánea, de origen natural. Necesita baños frecuentes y más alimento que otras razas para mantener su temperatura corporal alta.

El Gato Peterbald

Se originó en 1994 en Rusia, con la mezcla de las razas Donskoy y  Siamés. No requiere un aseo constante, pues su piel es mucho más seca.

El gato Levkoy Ucraniano

La raza Levkoy procede de Ucrania. Es, probablemente, mezcla de Sphynx con Scottish Fold. Tiene las orejas dobladas hacia dentro.

El Gato Kohana

El gato Kohana  apareció en 2002. Es completamente calvo, sin pelo ni folículos pilosos. Su rasgo físico más diferenciado sería su cara llena de abundantes arruguitas.

Para conocer más: www.mundogatos  y  www.laviejadelosgatos

El punto a favor más rotundo de estos gatos calvos, aparte de que no tienes que cepillarlos ni recoger pelos por las alfombras y sofás, es su personalidad.
En general todas las razas de gatos sin pelo son muy dóciles, muy cariñosos, despiertos, juguetones y adoran pasar tiempo con su dueño y disfrutar de su atención. 
Son sin duda gatos muy especiales. Pero se debe saber que  la propia ausencia de pelo requerirá tener algunos cuidados específicos con ellos.
Los gatos sin pelos no son hipoalérgicos por carecer de manto. El alérgeno fundamental se encuentra en la caspa de la piel. Aunque también es cierto que al carecer de pelos, este alérgeno se propaga menos en nuestra ropa y nuestro hogar.